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Otras ventajas son que el coste de la leche materna es menor que el de la leche artificial, sin necesidad de preparación e instantánea.
Por otro lado, el proceso de lactancia no solo beneficia al bebé, sino también a la madre. Tiene ventajas psicológicas y emocionales, ya que calma al bebé, por lo que ayuda en la relación madre hijo. Ayuda a bajar de peso de forma natural, ya que este proceso natural quema elevadas cantidades de calorías. La succión estimula las contracciones del útero, ayudando a que recupere su tamaño más rápido. Además, la producción de leche materna protege contra el cáncer de mama y disminuye los riesgos de desarrollar depresión post parto.
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