Embarazo y enfermería: Masaje perineal antes del parto. Episiotomía

El perineo es la zona que en las mujeres separa la vagina del ano. Ahí se albergan una serie de músculos fundamentales para una correcta sujeción del suelo pélvico. Este último es un conjunto músculos que rodean tanto la vagina como el ano, el recto, y también la vejiga.

Durante el parto, es posible que se produzca un desgarro del perineo, lo cual además de ser muy doloroso puede comprometer la sujeción de todos los músculos que conforman el suelo pélvico. En algunas ocasiones, el desgarro no ocurre de manera natural sino que se realiza una episiotomía: esto es, un corte hecho por el médico para facilitar la salida del bebé. Este procedimiento quirúrgico sin embargo suele cicatrizar peor que un desgarro natural, aunque ambos acarrean complicaciones y molestias.

En la siguiente gráfica se muestran la cantidad (en %) de episiotomías que se realizan dependiendo de si es un embarazo eutócico o instrumental. Los datos corresponden al año 2006 en España, y a un total de 58 hospitales.

Datos obtenidos de la Sección de Medicina Perinatal Sociedad Española de Gincecología y Obstetricia.

Una manera de evitar todo esto es realizar un masaje perianal antes del día del parto (comenzando a hacerlo unas 6 semanas antes), para ayudar a aumentar su flexibilidad y que así no sufra un desgarro o no sea necesario la realización de una episiotomía. Dicho masaje puede hacerlo la propia mujer o ser ayudada por su pareja.

En ambos casos, son necesarias unas medidas básicas de higiene como lavarse las manos, también colocar una toalla caliente debajo para aumenta la circulación en la zona, relajarse, y utilizar aceites y lubricantes aptos para mujeres embarazada. Se debe evitar llevar a cabo este masaje si se sufre de infección de orina o preeclampsia. La duración estimada es de 4-5 minutos.

Los pasos a seguir se detallan en la foto siguiente y en el vídeo adjunto, ya que es mucho más didáctico verlo que leerlo.